
ABDOMINOPLASTIA
- La Abdominoplastia completa: puede llevarse de una a cinco horas de tiempo y normalmente comienza con una incisión hecha de cadera a cadera exactamente encima del área púbica. Luego se hace otra incisión para liberar el ombligo de la piel circundante. La piel entonces se despega de la pared abdominal y deja aparecer los músculos y la fascia a ser recogidos. Luego la fascia muscular es apretada con puntos de sutura. Después de eso el cirujano remueve el exceso de grasa y se cierra la incisión, quedando de esta forma la piel y la grasa restante firmemente apretada. El tallo del ombligo es llevado a través de un nuevo agujero y suturado en su lugar. En muchas ocasiones la liposucción es utilizada para complementar la cirugía en lo que se llaman zonas de transición.
- La operación de Abdominoplastia parcial o mini Abdominoplastia: es un proceso quirúrgico que puede durar entre una y dos horas y este se lleva a cabo a través de pequeñas incisiones. La piel y la grasa se separan en una forma más limitada de la fascia muscular. La piel se estira y su exceso es retirado, el ombligo es relocalizado en la pared abdominal. Una parte de la pared de la fascia muscular abdominal es apretada y la liposucción es utilizada a menudo para dar contorno a las zonas de transición. Después de todo esto el colgajo de piel se sutura en su lugar.
VENTAJAS ¿Por qué?
- Su duración, ya que es casi permanente, teniendo los cuidados necesarios y si no se presenta un posterior embarazo.
- Mejora de imagen: los pacientes tras someterse a esta intervención mejoran su autoestima e imagen.
- Evita las infecciones que se producen a veces debajo de los sobrantes de piel.
- La cicatriz es menos perceptible con el paso del tiempo.
BENEFICIOS ¿Por qué?
- Conseguir un vientre firme y plano, extirpando la grasa y piel sobrante del abdomen y estirando los músculos de éste.
- facilita su higiene personal, así como la realización de actividades físicas.
- eliminar estrías y el exceso de piel en la parte inferior del abdomen por debajo del ombligo.
- Mejorar la apariencia del abdomen después de un embarazo.

¿QUIEN?
Son pacientes idóneos para realizarse una abdominoplastia:
- hombres y mujeres con buen estado de salud pero con acumulación de grasa en el vientre o piel flácida que no consiguen eliminarla mediante dietas o ejercicio físico.
- mujeres después del embarazo, ya que la masa muscular del vientre se dilata.
- personas con obesidades moderadas.
- pacientes que han bajado de peso de forma drástica y desean recuperar la elasticidad de su piel en el vientre.
- personas psicológicamente estables que desean conseguir un vientre plano.
- pacientes con flacidez en esta zona causada por problemas de constitución.
El procedimiento no puede realizarse si:
- se encuentra en una dieta estricta para perder una cantidad significativa de peso.
- Considera la posibilidad de un embarazo futuro.
- Tiene una enfermedad crónica grave, como enfermedades cardíacas, diabetes o el síndrome del intestino irritable
- Para pacientes que se han sometido recientemente a otra cirugía en esa misma área.
- Para personas con problemas de circulación.
- Para personas con problemas de cicatrización.
- Para pacientes con alguna infección activa.
- Para personas con problemas de coagulación de la sangre o debilidad en su sistema inmunitario.
- Para mujeres que están o crean estar embarazadas.
- Para pacientes con expectativas no realistas con los resultados que otorga la intervención.
RECOMENDACIONES
Lo primero que debe saber el paciente es que tiene la obligación de informarle a su cirujano plástico sobre el consumo total de medicamentos que esté llevando (aspirinas, anticonceptivos, etc.). Debe igualmente informarle acerca de todo tipo de enfermedades que haya padecido o esté padeciendo, como problemas de digestión, gripas recientes, problemas en las piernas, etc. porque pueden influir en la cirugía.
El cirujano plástico ofrecerá una lista con las instrucciones de lo que debe hacer con la dieta alimentaria, las bebidas y los medicamentos que debe evitar, evitar fumar antes y después de la cirugía, no exponerse al sol antes ni mucho menos después de la cirugía, porque el hacerlo antes o después, se posibilitará la inflamación y la pigmentación de la cicatriz.
Después de la cirugía el abdomen estará inflamado y producirá un malestar que se puede controlar con medicamentos que formulará el cirujano, quien además le pedirá el uso de una faja de lycra. El cirujano plástico también programará el retiro de los puntos y de los drenes. Para volver a las actividades de rutina deberá ser entre la primera y segunda semana después de la cirugía, dependiendo de cada paciente.
Las cicatrices pueden den dar el aspecto de empeorar durante los primeros 3 a 6 meses mientras están en periodo de curación; esto es normal. Hay que esperar entre 9 meses y 1 año para que la cicatriz se aplane y aclare. A pesar de que las cicatrices no desaparecerán, estas no serán visibles, incluso cuando se lleve bikini o bañador.